Los gigantes del comercio minorista, Walmart y Amazon, están explorando la posibilidad de emitir sus propias stablecoins corporativas, una estrategia que podría transformar el mercado de pagos digitales y reducir su dependencia de los sistemas bancarios tradicionales. La iniciativa busca optimizar transacciones, disminuir costos operativos y ofrecer mayor comodidad a los clientes.
Las stablecoins, criptomonedas diseñadas para mantener un valor estable, suelen estar vinculadas al dólar estadounidense o a materias primas como el oro. Su adopción permitiría a estas empresas reducir las comisiones que actualmente pagan a entidades como Visa y Mastercard, cuyos valores bursátiles ya han reflejado el impacto de esta posible transición.
Según informes recientes, Expedia y algunas aerolíneas también están evaluando la integración de stablecoins en sus sistemas de pago. En el caso de Amazon, la compañía reportó ingresos anuales de 638 mil millones de dólares en 2024, con ventas en su plataforma de comercio electrónico que alcanzaron 447 mil millones. Walmart, por su parte, superó los 100 mil millones de dólares en ventas globales por comercio electrónico en 2023.
Para que estas empresas puedan emitir stablecoins, es necesario contar con un marco legal sólido. Actualmente, el Congreso de Estados Unidos analiza el Genius Act, un proyecto de ley que busca establecer regulaciones claras para la emisión de estas criptomonedas y garantizar el cumplimiento de normativas contra el lavado de dinero.
Además, grandes instituciones financieras como JPMorgan, Bank of America, Citigroup y Wells Fargo han discutido la posibilidad de lanzar sus propias stablecoins, lo que refleja un creciente interés del sector bancario en esta tecnología.
Por ahora, ni Walmart ni Amazon han confirmado oficialmente sus planes. Sin embargo, de concretarse esta estrategia, el impacto en el comercio digital y los sistemas de pago podría ser significativo, marcando un nuevo capítulo en la evolución financiera global.