La semana pasada la Sunat hizo un recordatorio a los influencers y personas que generan ingresos por su actividad en redes sociales para que empiecen a declarar sus ingresos y pagar impuestos.
Esta fiscalización a influencers comenzó en el 2020, luego que la Sunat verificara que este grupo de personas no declaró un total de S/ 50 millones en renta entre el 2016 y el 2018.
Actualmente hay alrededor de 73,000 influencers, según un estudio de agencia Influencity, pero ¿cuáles son los motivos por los que deben pagar Impuesto a la Renta?
Este grupo de contribuyentes está obligado a pagar impuestos por los ingresos que generan con la venta de productos online, monetización de sus videos o por promociones pagadas, que es considerado renta de tercera categoría, la cual se grava con una tasa de hasta 29.5%.
La primera fuente de ingresos de estas personas se da mediante auspiciadores directos, quienes pagan para que se muestren sus productos en sus canales, historias o contenido que produzcan.
Un estudio realizado por Axon Marketing & Comunications estima que aquellos influencers que cuentan con entre 100 mil a 250 mil seguidores pueden llegar a cobrar entre US$ 500 y US$ 1,000 a marcas por campaña publicitaria.
Mientras que un análisis de Toulouse Lautrec indica que contratar a uno de los influencers más exitosos del país podría costar entre US$ 2,000 y US$ 2,500 por campaña.
Otra fuente de ingresos de los influencers son los pagos realizados por las propias plataformas en las que operan, como YouTube o Twitch, las cuales pagan por la publicidad que aparece entre los vídeos.
Por último, otra fuente de ingresos de estos contribuyentes son las donaciones de sus seguidores, las cuales usualmente se realizan mediante páginas especializadas como “Patreon”. Esto último no puede ser gravado por la Sunat.
